En oportunidad de la Muestra Itinerante Volver a Carrillo realizada en el mes de junio en la ciudad de Córdoba, conversamos y acompañamos a las Madres de Ituzaingó en el inicio del primer juicio de América latina a las fumigadoras asociadas al modelo de explotación rural basado en el monocultivo de soja. Desde ese momento trabajamos en este material que intenta hilvanar lo invisible, aquellas costuras escondidas bajo discursos que disfrazan a la muerte de oportunidad.
Todas estas voces que no resuenan ni en los programas de la tele, ni se repiten indefinidamente en las radios como las otras, cuentan su verdad y su lucha a contrapelo, a una sociedad que muchas veces por desconocimiento, no puede escuchar.
¿Cómo atraviesa el modelo sojero la vida de los vecinos que viven en las zonas linderas a los campos fumigados? ¿y la de los que no viven en zonas rurales?; la enfermedad ¿es un negocio?; ¿cómo son alterados el suelo, el aire, el agua, las costumbres?; ¿llegamos al fin del mito de campo como sinónimo de salud?, ¿son hoy las ciudades más saludables que el campo?, ¿cuál es el rol de los profesionales, de los médicos, frente a una epidemia de cáncer? y el del Estado? ¿qué lugar ocupan los laboratorios oncológicos? Los productos que consumimos día a día ¿están incluidos en este proyecto económico?.. todas estas preguntas y el programa intentan ser un aporte para la reflexión, el debate y la acción, los invitamos a escuchar y también a que nos manden nuevas preguntas, impresiones, reflexiones, materiales relacionados porque estamos convencidos de que solo caminando juntos otra salud es posible.
Agradecemos los testimonios de Sofía Gatica y Norma Herrera, Madres de Ituzaingó y querellantes en la causa; Jorge Rulli, militante y fundador del Grupo de Reflexión Rural y de la Campaña “Paren de Fumigar”; Martín Carranza, integrante de la Asamblea Córdoba Ciudad Despierta perteneciente al Colectivo Paren de Fumigar; Luis Gómez, trabajador del Hospital de Niños de la ciudad de Córdoba; el ingeniero agrónomo Marcelo Lerussi, integrante del Movimiento de Agricultores y Agricultoras urbanos; y de Osvaldo Paco Camero militante del Movimiento por un Sistema Integral de Salud. La música, de la mano de Los Nuñez con Ruiz Guiñazú, María Elena Walsh, Calle 13 y Jorge Drexler.
Conducción y dirección: Daniel Godoy; Coordinación general: Cecilia Fernández Lisso; Producción: María Emilia Menna; Colaboración: Marcos Godoy, Iván Suasnábar, Sofia Goñi, Jeremías Previtali.
Síntesis Ampliada
Las Madres de Ituzaingó repudiaron la decisión de la Justicia.
La Cámara 1ª del Crimen de la ciudad de Córdoba condenó ayer a la noche a tres años de prisión condicional, no efectiva, al productor Francisco Parra y al piloto aeroaplicador Edgardo Pancello por contaminación ambiental a partir de fumigaciones ilegales en barrio Ituzaingó Anexo, al tiempo que absolvió al productor Jorge Gabrielli.
El veredicto anunciado para ser leído a las 14 hs, fue difundido pasadas las 19 hs. ante la espera de justicia de cientos de personas en las afueras de Tribunales II. La sentencia avivó el dolor de las madres que esperaban que la justicia hablara en nombre de sus vidas y las vidas de tantos hijos y vecinos envenenados por las fumigadoras acusadas.
El juicio de las Madres de Ituzaingó es el primer juicio a las fumigaciones efectuado en América Latina, una acusación al modelo productivo instalado en nuestro país en la década del 90, que se basa en el comercio de la soja transgénica, sustentado con todo tipo de manipulaciones de suelo, aire y agua que no solo atentan contra la vida en todas sus formas, sino que causaron y causan la enfermedad y muerte en todo nuestro territorio Nacional. Un modelo económico que se esparce y reproduce a través de su matriz de contaminación y muerte en Argentina y Latinoamérica.
Con Armar la Trama tuvimos la oportunidad de compartir con las Madres de Ituzaingó y los ciudadanos, organizaciones y asociaciones que acompañan su larga lucha, el inicio de este juicio histórico. Sus testimonios y los de quienes como las Madres investigan, luchan y gritan que esta realidad de ventajas para los negociadores debe terminar, hacen la lucha de las Madres de Ituzaingó nuestra lucha.
Hacia 2002, las mujeres del Barrio Ituzaingó Anexo, barrio periférico de la provincia de Córdoba y una zona urbana gravemente afectada por el uso indiscriminado de agrotóxicos, fueron quienes advirtieron en esta práctica despiadada la obligación de organizarse por la salud de su pueblo, nuestro pueblo. Junto al Grupo de Reflexión Rural y el Colectivo Paren de Fumigar, elaboraron un trabajo de investigación que se sustenta en los informes suministrados por los pobladores de las muchísimas localidades afectadas y en ellos se exponen los problemas concretos de cada lugar originados directa o indirectamente por la acción de los plaguicidas. No es casual la geografía de afección: son las principales áreas productoras de soja transgénica, lo que ha provocado un aumento exponencial en el uso masivo de agrotóxicos y donde existen más de 200 casos de cáncer en una población de no más de 5.000 habitantes.
Después de más de 10 años de lucha sostenida, las madres de Ituzaingó lograron avanzar legalmente en este conflicto que rápidamente se convierte en causa nacional: el juicio a las fumigaciones es histórico en nuestro país, porque es el primer antecedente legal en América Latina que busca frenar el avance de la agricultura tóxica.
