El pami que nos dejan y el pami que hay que recuperar


La segunda semana de agosto se dieron a conocer dos resoluciones -559 y 560- del INSSJyP donde se dispone la disolución de las áreas de prestaciones sociales de las Unidades de Gestión Local y Agencias. Esto implica que se dificulten, aún más, las prestaciones sociales para todos los jubilados.

Trabajadores y trabajadoras del PAMI denuncian, hace más de diez años, irregularidades y acciones antidemocráticas en la institución.

hqdefaultEnrique Peresan, Secretario General ATE San Martín y trabajador del PAMI conversó con Armar la Trama y contó la situación que se está viviendo allí.


Quique Peresan

23b4b2e3aa10f55908261643c7fe7753_mAportes para la discusión sobre el conflicto y la situación en el INSSJP

Documento de trabajo del Área de Salud del Instituto de Estudios sobre Estado y Participación (IDEPSALUD) de ATEARGENTINA

Es una verdadera frutilla del postre, en el marco del fin de ciclo del actual gobierno, las recientes resoluciones 559 y 560 firmadas por parte del Director Ejecutivo (en los hechos interventor de facto durante más de diez años), las que dispusieron la disolución de múltiples estructuras exclusivamente comprometiendo los niveles operativos donde se realiza la atención directa de los afiliados a esta Obra Social.

No porque sean distintas al curso de la “gestión Di Cesare”, sino porque aparecen después de 11 años de y sobre el filo del cambio de gobierno.

Las preguntas acerca de las razones de esta oportunidad de la decisión aparecen naturalmente… trabajo sucio? Negocio? Cualquiera/s que sea/n, no deben obturar el análisis y el debate acerca del PAMI que nos dejan, y el PAMI que hay que recuperar.

El martes 8 de julio de 2003, el entonces presidente Néstor Kirchner firmaba el decreto 348, mediante el cual se disponía la intervención del PAMI por 180 días, “… luego de comprobar el anormal funcionamiento de la obra social de los jubilados, y resolvió avanzar en un proceso de reestructuración que debía terminar en la creación de «un nuevo modelo del PAMI» en cuanto a la gestión y la prestación de servicios.

El anuncio lo hizo público el entonces ministro de Salud, Ginés González García (el mismo de Duhalde), y a través del mismo se designaban como interventor a Juan González Gaviola (el mismo que años después “operacionalizaba” una ley sobre ART repudiada por la mayoría de las Organizaciones gremiales), y como subinterventor a José Granero (del mismísimo “riñón” K, hoy procesado por sus vinculaciones referidas al tráfico de efedrina durante su gestión al frente del SEDRONAR).

Se argumentaba en esos anuncios, que en el PAMI, «se reiteraban una serie de vicios» en la gestión, no existían «sistemas y circuitos administrativos, manuales de compras» o «procesos licitatorios para la renovación de servicios de salud», “la planta de trabajadores está sobredimensionada” con una «cantidad exagerada de representantes sindicales»,

«… El Presidente no decidió el desguace del PAMI, ni dividirlo, ni fragmentarlo, como los modelos de descentralización de la década del 90…”, se apuraban a aclarar los

voceros de la Intervención. “… no habrá «discrecionalidad», sino que “habrá supervisión forma permanente y en tiempo real por los organismos de control» del Estado.

Ocaña mediante (nombrada como “Directora normalizadora”) y bajo los mismos mandamientos de siempre, llegó Luciano Di Césare a finales del 2007.

Nada ha cambiado… o mejor dicho, sí…

En esos siete años, el organismo prácticamente duplicó la cantidad de empleados, entre los de planta permanente y los contratados. Pasó de tener 10.700 a poco más de 20.000, la gran mayoría son cargos políticos. “Di Césare fue desplazando al personal de carrera por trabajadores sin experiencia… hay cada vez más gente, pero por ejemplo no hay asistentes sociales y los médicos no alcanzan. El PAMI intervenido es un negocio fenomenal. Sin controles hacen lo que se les canta. La normalización es un paso fundamental», alertó por ejemplo Eugenio Semino, defensor de la Tercera Edad.

El presupuesto del Instituto asciende en la actualidad a unos 45.000 millones de pesos, algo así como el sexto presupuesto del país, detrás del gobierno nacional, la Anses, la provincia de Buenos Aires, la Ciudad de Buenos Aires y Santa Fe.

Manejo de fondos que han sido observados por la propia Auditoría General de la Nación (AGN), «… dificultades y atrasos para acceder a la información…”

No obstante las quejas de los beneficiarios en cuanto a la calidad y oportunidad de las prestaciones, el Instituto ostenta excedentes colocados a plazo fijo, o desvía fondos hacia el gobierno nacional a cambio de Letra del Tesoro (LETE).

Desmanejos con los balances; discrecionalidad en los pagos; demoras en los pagos a los prestadores con la consecuente repercusión en la calidad del servicio, entre otras cuestiones, son algunas otras observaciones efectuadas.

Y en este marco de presupuesto de bonanza y fondos excedentes, el PAMI sigue exhibiendo las irregularidades crónicas en el servicio de prestaciones: “ni buenas ni suficientes”. Las eternas dificultades en la obtención de camas para internación; hogares geriátricos y establecimientos de salud mental que no cumplen requisitos, y falta de médicos y centros de atención.

Por todo ello, decimos que las RESOLUCIONES 559 Y 560 (que deben ser derogadas inmediatamente) son la frutilla del postre de un proceso sostenido y creciente de desguace del Organismo.

Debemos transitar el conflicto desatado las Resoluciones en cuestión, problematizando y reclamando por situaciones estructurales como:

* La total y verdadera normalización y democratización del Instituto, mediante elección directa y secreta de los afiliados, consagrando un Directorio con representación mayoritaria de jubilada/os, pensionada/os y trabajadora/es.

* Reinstalar las funciones de auditoría y control que el PAMI abandonó en la actual gestión

* Re-implementar oficinas de enlace con personal profesional y administrativo de PAMI en la totalidad de los centros de internación (hospitales y sanatorios) contratados por el INSSJP a fin de resolver “en el momento” las graves dificultades que sufren los mayores internados por razones clínicas. Con funcionamiento de 8 a 20 hs y guardias nocturnas

* Retomar la función resolutiva y contenedora del médico de cabecera, a fin de que los mismos no sean meros transcriptores de recetas y derivadores de pacientes. Con revisión de cupos de pacientes acordes a un funcionamiento eficaz, actualización de honorarios por cápita y control responsable por parte de la Obra Social.

* Recupero de la totalidad de las cápitas, prestaciones y servicios privatizados en la operatoria del vaciamiento de los efectores propios.

* Recupero del valor social del medicamento con eliminación del indigno sistema de la tramitación de medicación sin cargo, e implementación de un nuevo vademécum actualizado según estándares internacionales en la materia con previo estudio por parte de entidades universitarias públicas nacionales. El afiliado en ese contexto no deberá abonar ningún concepto económico de su bolsillo, a excepción de la medicación sin prescripción profesional.

* Eliminación de todo tipo de transferencias y/o préstamos realizados y a realizarse con fondos del INSSJP, por fuera de sus cometidos específicos, así como una urgente revisión con derivación a la justicia de todos los préstamos otorgados por el PAMI durante la administración Di Cesare.

* Urgente ampliación de las camas de internación en todos los distritos y unidades de gestión local donde falten dichos recursos, asumiendo similar temperamento con las plazas de residencias para mayores en situación de dependencia.

* Inmediata actualización de los subsidios económicos destinados a paliar contingencias sufridas por los mayores, en particular quienes atraviesan situaciones de dependencia.

* Implementación a nivel nacional de sistemas de apoyo domiciliario (enfermería y cuidadores) orientados a sostener a los mayores dependientes en sus domicilios habituales (hasta donde sea prudente y posible hacerlo) y como forma de apoyo para sus familiares y convivientes

* Respeto al Convenio Colectivo del PAMI I con puesta en vigencia de concursos para ocupar los cargos vacantes así como la derogación de las resoluciones que eliminan áreas operativas

* Implementación de una nueva estructura orgánico funcional que valorice las acciones directas con los afilados y transparente las áreas y servicios desarrollados en el plano local, asegurando una dotación de trabajadores necesarios para cubrir las necesidades de los afiliados del INSSJP.

* Afiliación inmediata y automática de todo beneficiario que haya acreedor de un haber previsional contributivo y en condiciones de recibir la cobertura del INSSJP, con la eliminación de trámites innecesarios.

* Implementación inmediata de todas las DAMNPyP (División atención medica programada y no programada) “GUARDIA” en cada una de las cabeceras que existieron años anteriores en las localidades de Morón, Lanús, San Martin, Rosario y Capital Federal. Para brindar mejor calidad de servicio y pronta atención a los jubilados y pensionados. No como en la actualidad que el servicio esta centralizado y eso produce DEMORAS en la atención del afiliado.

* Recuperación integral de los efectores propios, como los policlínicos PAMI 1 y 2 de Rosario, o el ex Hospital Francés, hoy Cesar Milstein, nosocomios totalmente vaciados, que no tienen recuperación en lo inmediato ya que se han perdido prestaciones propias, laboratorios, rayos, diálisis, bajas en las programaciones de cirugías, interdisciplinas, trabajadores sociales, psicólogos, etc.


Julio Fuentes, Secretario General
Hugo “Cachorro” Godoy, Secretario General Adjunto.
Daniel Godoy, Coordinador Nacional IDEPSALUD


Publicado en: ATE


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